miércoles, 22 de septiembre de 2010

CUANDO EMPIEZO A SER UN VERDADERO CRISTIANO

CUANDO EMPIEZO A SER UN VERDADERO CRISTIANO

¿Por qué me llamáis Señor, Señor, y no hacéis lo que yo os digo? San Lucas 6: 46.

Cuando pasamos por las calles de este mundo, vemos a muchas gentes y entre otros, a muchos con una biblia en la mano. Seguro pertenecen o asisten a un grupo religioso. Pero; ¿Cuántos de ellos, son cristianos auténticos, originales, verdaderos?

Continuamente vemos en la tele a unas personas que usan las prendas de los militares, pero ellos no lo son. Son una fotocopia. ¿Por qué hay tantas monedas falsas, billetes falsos? Porque tomaron su forma, de uno que es autentico. Y así sucesivamente, existen en los mercados, relojes falsos, piedras preciosas de imitación. Son casi iguales a las originales, pero no son genuinas. De igual manera hallamos a muchos que dicen ser cristianos, pero sencillamente; son lobos rapaces vestidos de ovejas. Visten igual, caminan igual, cantan igual. Lo único en lo que no son iguales; es en el fruto.

La cizaña en su principio es igual al trigo. Crecen juntas. Surge la espiga, la gavilla, y el fruto. Pero la cizaña es amarga, se quema en el fuego. El trigo es delicioso. Sabe bueno. La harina de la cizaña no sirve para nada. El trigo es una bendición de Dios.

Las diez vírgenes eran iguales en todo. Todas esperaban al esposo. Todas tenían aceite y lámparas. Todas eran vírgenes, todas cabecearon y todas se durmurieron. Solo cinco eran autenticas. Conoce Dios a los que son suyos; y apartase de iniquidad todo aquel que invoca el nombre del Señor Jesús.

A los líderes religiosos moralistas de Israel, que presumían ser herederos de la vida eterna por el solo hecho haber haber nacido en Israel; Jesús les habló con claridad diciéndoles. Ustedes de labios me honran, más su corazón esta distante de mí. Solo lo eran de boca para afuera. Y más adelante les dijo: Si vuestra justicia, no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entrareis en el reino de los cielos.

Entonces ¿Cuándo empiezo a ser un verdadero cristiano? ¿Cuando empiezo a asistir a una iglesia, cuando me arrepiento, me bautizo?

Mi vida cristiana empieza, el día que me rindo a Dios. Que me someto a él. El día que entiendo que Jesús pagó por mí un enorme precio y que en virtud de ello no me debo a mí, sino que soy propiedad de él. El día que entiendo, que sobre un alto, hay uno más alto y sobre este, está el más alto de todos.

¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? 1ª de Corintios 6; 19 El texto me está diciendo, que: no soy dueño de mi vida, que no puedo ni debo hacer lo que quiero, porque por mi se pagó un precio muy grande. Soy de Dios. No puedo disponer de mis actos, conforme a mi voluntad. Tengo que aprender a hacer su voluntad. Salmos 143: 10.

El día que tomo la decisión de renunciar a lo prohibido por Dios, el día que me aparto del mal para seguir las sendas del bien de todo corazón; Ese día empiezo a vivir como un cristiano verdadero. En el momento en que me someto a Dios y me rindo incondicionalmente crucificando mis caprichos, mi orgullo, mi vanidad; ese día empiezo a vivir para Dios.

En el momento en que decido que yo tan solo soy una oveja, que el Señor es mi Pastor, que no puedo saltarme los corrales ni las cercas. El día que me despojo del viejo hombre, el cual está viciado con sus hechos, y me revisto del nuevo hombre creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad; Ese día empiezo a ser un cristiano de verdad. No solo respaldado por Dios, sino aprobado por el. Ese día puedo decir: Heme aquí Señor ¿que quieres que haga?

Recordemos que: Dios es Dios de requisitos, exigente; No se tranza con nada. Lo único que lo conmueve a él, es un corazón contrito y humillado. En el libro de Génesis se dice, que: Dios invitó a Abraham a salir de su tierra, de su parentela y de la casa de su padre. Cuando Dios ha querido tratar con alguien, lo primero que hace es extraerlo del mundo. A Abraham lo sacó de la tierra de Hur (tierra de paganos) A Israel de Egipto y a la iglesia de en medio del mundo.

Al estudiar las escrituras sagradas, observamos que: Abraham no obedeció a Dios plenamente. Se quedó en su tierra hasta que muriera su padre. Pero notemos también, que Dios no le dio su bendición, hasta que entró a la tierra de promisión. Dios exige obediencia plena, rendición completa, consagración absoluta y santidad sin la cual nadie verá a Dios.

Cuantas veces el creyente se pregunta: ¿Por qué me sale todo mal? La razón es: No hay una consagración, ni entrega total. Se vive el cristianismo a su manera, a sus caprichos, a sus antojos. Entonces surge la pregunta del Señor: ¿Por qué me llamáis Señor, y no haces lo que yo os digo? Todo lo que Dios nos dice; está escrito en su palabra. Por esta causa es que hay que madrugar a orar y estudiar (escudriñar) la palabra del Señor. Erráis ignorando las escrituras y el gran poder de Dios. Fuimos renacidos para obedecer y ser rociados con la sangre inmaculada del Cordero de Dios: Jesucristo.

La biblia dice: Ciertamente el obedecer, es mejor que los sacrificios, y el prestar atención, que la grosura de los carneros. 1º de Samuel; 15: 22. De poco sirve el ayunar y el orar largamente, cuando no se obedece la palabra del Señor.

Empezare a ser un verdadero cristiano, a disfrutar en plenitud las ricas y siempre abundantes bendiciones de Dios; El día que me apoyo en Dios de todo corazón, cuando dejo de apoyarme en mi propia prudencia. Cuando lo reconozco en todos mis caminos, y permito que el enderece mis torcidas veredas. La verdadera vida que da Dios, fluirá en mí; cuando deje de ser sabio en mi propia opinión. Cuando el temor de Dios surja en mi vida espontáneamente, para seguirle de todo corazón

Entonces en esta sencilla lección de la palabra de Dios; aprendemos, que: La única manera de ser aceptados por el Dios verdadero y Único, es sometiéndonos voluntariamente a él y su palabra.
Nos corresponde entonces; Dejar nuestros caminos, nuestros propios conceptos, nuestros caprichos, y regresar a la obediencia plena al evangelio de Dios.

www.jesuselrey.org.
jorgelopezmera@hotmail.com

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